Panoramas sombríos para el mercado del transporte marítimo

Los índices de tarifas de entrega inmediata (tarifas spot) varían, pero en general indican que el mercado de envío de contenedores de EE. UU. está tendiendo a la baja nuevamente.

Los países desarrollados siguen luchando contra los efectos de la inflación galopante y la recesión, que empeoran las perspectivas en Asia. La demanda de contenedores continúa disminuyendo y los volúmenes están volviendo a los niveles previos al COVID.

La rentabilidad del transporte marítimo alcanzó niveles históricamente altos durante 2022, principalmente impulsada por excepcionalmente altos promedios en las tarifas de transporte. Las interrupciones operativas en la cadena de suministro que afectaron el mercado durante la mayor parte de 2021 disminuyeron gradualmente durante 2022, a medida que disminuyeron las congestiones y las restricciones relacionadas con el COVID. En consecuencia, la confiabilidad de la planificación también mejoró durante la segunda mitad del año.

En 2023, se espera que la demanda de bienes de consumo se desacelere. La incertidumbre geopolítica seguirá siendo alta, y se espera que se reconfiguren algunas relaciones comerciales de larga data. El resultado será el comienzo de un restablecimiento fundamental de las cadenas de suministro en las que se verán cada vez más determinadas por las condiciones políticas. Se espera que la demanda mundial de contenedores disminuya en 2023. Se presume que el mercado mundial de contenedores marítimos crezca poco o nada, a una tasa de entre -2,5 % y +0,5 %.

Después de un accidentado 2022, 2023 podría resultar aún más desafiante para el comercio mundial de bienes. Hay un debilitamiento de la demanda de los consumidores, un exceso de oferta recurrente, la continua crisis energética y la inflación, todo en el contexto de la invasión en curso de Ucrania y, más recientemente, un gran terremoto en Turquía que sacudió las cadenas de suministro mundiales. La economía global está sintiendo los efectos. El debilitamiento de la demanda ha hecho bajar las tarifas de entrega inmediata (tarifas spot) en las principales rutas comerciales, poniendo fin a un extraordinario período de dos años para el envío de contenedores.

“Dado que el mercado de envío de contenedores tuvo un pico en temporada de importación relativamente tranquilo, había expectativas de que las tarifas de transporte de importación de América del Norte continuarían corrigiéndose a la baja, pero se estabilizarían en el Año Nuevo. Ya estamos a dos meses de 2023 y ahora todos nos preguntamos dónde está el fondo. Aunque los gobiernos de todo el mundo están tratando de respaldar la demanda con grandes paquetes de estímulo fiscal, la gran incertidumbre en torno al aumento de las facturas de energía en Europa, el endurecimiento de las condiciones crediticias de EE. UU. y un entorno de crecimiento moderado en China no pintan un panorama positivo. Los consumidores también se enfrentan a la incertidumbre económica, y la fortaleza del dólar estadounidense ha hecho que sea más caro importar cosas a China”, dice Tobias Sopalla, Director de Operaciones del Departamento de Logística Oceánica de AsstrA-Associated Traffic AG.

“El mercado ha enfrentado muchas dificultades en los últimos tres años: las crecientes tarifas en el transporte hicieron desfavorable la importación de bienes desde China; la caída de la demanda y las restricciones de COVID crearon problemas en el estable círculo de producción y el comercio. Ahora, desde que China reabrió a fines de 2022, las cadenas de suministro están comenzando a reconstruirse nuevamente, pero aún hay escasez de mano de obra y pedidos de los clientes. Todo esto ha llevado a la caída de las tarifas de transporte marítimo superior a la época anterior a la pandemia: por ejemplo, las tarifas de TL CN-US han caído de ~10 000 USD a ~2 000 USD por contenedor de 40 pies en promedio. Eso significa menores ganancias para nosotros como transportistas, pero al mismo tiempo la posibilidad de que el mercado salga de este círculo vicioso”, dice Kseniya Tereshkina, Gerente de Business Accelerator Project de AsstrA.