El administrador de la infraestructura ferroviaria elabora un plan de reducción de emisiones con cinco líneas de actuación y 56 proyectos para reducir el impacto medioambiental de su actividad.
Adif y Adif Alta Velocidad han diseñado un plan de lucha contra el cambio climático propio, a desarrollar entre 2018 y 2030 y que pretende impulsar la contribución del ferrocarril a los objetivos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero.
En concreto, los administradores públicos de la infraestructura ferroviaria quieren, con este plan, reducir el consumo energético del sistema ferroviario en 2.900 GWh acumulados en el período, recortar las emisiones de gases de efecto invernadero en unas 9.000 kilotoneladas de CO2 equivalente, así como reducir su huella de carbono en, al menos, un 25% en 2030, respecto al valor de 2016, y hasta un 86% si se tiene en cuenta la compra de energía eléctrica verde.