España y Francia ingresaron a la lista de los principales países europeos afectados por la pandemia COVID-19. Los gobiernos impusieron una cuarentena estricta a finales de marzo de 2020, y los residentes de España y Francia pasaron 7 semanas en casa. A principios de mayo, Los gobiernos flexibilizaron su régimen de aislamiento.
Descubrimos cómo la pandemia afectó el mercado de transporte de carga de los países más grandes de Europa occidental de la mano de los gerentes nacionales de las regiones.
“Es de imaginarse que, con la introducción de una cuarentena estricta y el cierre de varias empresas, el volumen de tráfico de carga disminuya. En el transcurso de 7 semanas, el mercado sufrió un giro. En la realidad "previa a la cuarentena", tanto España como Francia actuaban como países importadores. Durante la pandemia, las importaciones disminuyeron significativamente. Las empresas exportadoras, especialmente los fabricantes de bienes esenciales y de importancia estratégica, continuaron su trabajo. Algunos incluso han aumentado el volumen de ventas.
El cambio provocó una escasez de oportunidades de transporte a lo largo de rutas populares. Por ejemplo, Polonia, el mayor exportador de muebles, ha reducido la escala de producción. Esto condujo a una disminución en el volumen de tráfico en los Trade Lane Polonia-España y Polonia-Francia. Después de eliminar las rigurosas restricciones, el poder adquisitivo ha cobrado vida. La situación habitual con el transporte también se está restaurando", comparte Arthur Antonin, Gerente Nacional para España.
Francia y España comenzaron a salir de la cuarentena el 11 de mayo. En el reino de España, la siguiente etapa comenzó el 25 de mayo. Francia entró en la segunda fase el 2 de junio. Parques, restaurantes, instituciones educativas y tiendas están abriendo gradualmente. A finales de junio, el gobierno de ambos estados planea restaurar la libre circulación dentro de los países.
“Durante el cierre de emergencia, el mercado fue reestructurado. Las industrias automotriz, minorista, cosmética y de perfumes, las cuales se han mantenido a lo largo de la historia altamente desarrolladas en Francia, suspendieron sus actividades o se vieron obligadas a reducir la cantidad de horas de trabajo.
El sector agrícola también sufrió significativamente. La primavera es la época del trabajo en el campo, pero este año la pandemia produjo algunos ajustes. Las tradicionales entregas de maquinaria agrícola para esta época del año se realizaron en un volumen mucho menor.
La cartera de Clientes de AsstrA en la región incluye compañías de diversas industrias. En algunos sectores, se observó crecimiento: química, productos farmacéuticos, industria del papel. Gracias a la diversificación, el volumen total de entregas realizadas ha cambiado de manera insignificante”, agrega Natalia Iwanowa-Kolakowska, Subdirectora Regional en la UE y Gerente Nacional para la región de Francia.
La cuarentena ha afectado todos los sectores de la vida. La Home office en lugar de la oficina de rutina, clases en línea para escolares y estudiantes, capacitación y talleres por YouTube, paseos virtuales por museos y cumpleaños con amigos a través de videollamadas en las redes sociales. La forma de comunicación con los Clientes ha cambiado. Los regulares vuelos para encuentros “cara a cara” han sido reemplazados por conferencias en línea mediante Zoom.
“Las medidas forzadas nos obligaron a analizar patrones de comportamiento habituales. Resultó que las negociaciones por medio de pantallas de computadoras y teléfonos pueden ser tan productivas como las reuniones "en vivo". Solo que la comunicación a través de video ahorra significativamente tiempo y recursos financieros, e incluso permite reducir la huella de carbono. Se hizo evidente que parte de los hábitos ya pueden dejarse en el pasado sin pérdida para los Clientes”, resume Natalia Iwanowa-Kolakowska.